La depresión es una enfermedad médica común y seria que afecta negativamente cómo te sientes, cómo piensas y cómo actúas. Puede llevar a una variedad de problemas emocionales y físicos y disminuir tu capacidad para funcionar en el trabajo y en el hogar. La depresión es un problema importante en los Estados Unidos, y es costosa. La Agencia para la Investigación y la Calidad en el Cuidado estima que la depresión cuesta $83 mil millones cada año. La depresión afecta a personas de todas las edades, aunque es más común en mujeres de 20 a 59 años. Puede aparecer a cualquier edad y durar un corto tiempo o continuar durante años. Puede ser leve o severa. Los síntomas más comunes de la depresión incluyen:
Tristeza prolongada y/o sentimientos de desesperanza
Pérdida de interés en casi todas las actividades
Alteraciones del sueño (insomnio, sueño excesivo)
Fatiga y disminución de la energía
Cambios en el peso (pérdida o ganancia de peso no intencional)
Dificultad para concentrarse, recordar detalles y tomar decisiones
La buena noticia es que la depresión es tratable. Para muchas personas, la depresión no desaparece por sí sola, pero el tratamiento puede ayudar. La depresión generalmente puede ser tratada con éxito con medicación, psicoterapia o una combinación de ambas.
La depresión es más que solo sentirse triste, vacío o tener episodios de llanto. Causa síntomas severos que interfieren con tu capacidad para funcionar en tus actividades diarias. Los síntomas más comunes de la depresión incluyen:
Tristeza prolongada y/o sentimientos de desesperanza
Pérdida de interés en casi todas las actividades
Alteraciones del sueño (insomnio, sueño excesivo)
Fatiga y disminución de la energía
Cambios en el peso (pérdida o ganancia de peso no intencional)
Dificultad para concentrarse, recordar detalles y tomar decisiones